El Dr. Ing. Martin H. Virnich, profesional de la Ingenieurbüro für Baubiologie und Umweltmesstechnik, Mönchengladbach, explica los fundamentos técnicos sobre este polémico tema que ahora tienen en agenda los angosturenses.
Perjuicios y riesgos para la salud por las antenas de telefonía móvil
Dr.-Ing. Martin H. Virnich, Mönchengladbach
1. Introducción
Con perjuicio se hace referencia a los elementos externos objetivamente mensurables (de tipo físico o químico, por ejemplo) que ejercen una influencia sobre las personas tanto en el entorno urbano como en el laboral.
El perjuicio puede derivar en un daño para la salud.Para que sea considerado un daño es necesario que su reproducción esté científicamente probada. También ha de probarse la existencia de una relación causa-consecuencia cuantificable entre el perjuicio y el daño y de un modelo explicativo a ser posible. La confirmación de un daño según criterios científicos es, por lo general, la condición previa para determinar valores límite legalmente obligatorios.
En caso de que existieran indicadores o sospechas de un posible daño, que todavía no han sido tratados intensivamente por los expertos, existe riesgo de daño para la salud. Este riesgo puede ser mayor para algunos grupos de personas, como niños, enfermos y personas sensibles, que para el resto de la «población media».
La valoración y la predisposición del riesgo personal, así como la toma de medidas preventivas para la disminución del riesgo dependen normalmente de las iniciativas de cada uno.A continuación se describen algunos de los factores más importantes de los efectos biológicos de las ondas electromagnéticas de alta frecuencia, el correspondiente daño potencial y sus posibles riesgos para la salud.
1.1. Tamaño y localización anatómica de las partes corporales expuestas: aquí se distingue principalmente entre exposición corporal total y parcial.
1.2. Frecuencia de las ondas portadoras (= frecuencia de emisión), medida en hercios [Hz] y en sus múltiplos (kilohercios [kHz] = 1.000 Hz,
megahercios [MHz] = 1000.000 Hz, gigahercios [GHz] = 1.000.000.000 Hz)
1.3. Intensidad, medida como– Intensidad eléctrica de campo en voltios por metro [V/m] y por fracción de segundo (milivoltio por metro [mV/m] = 1 / 1.000 V/m, microvoltio por metro [µV/m] = 1 / 1.000.000 V/m) o como
– Densidad de radiación (también llamada densidad de flujo de potencia), medida en microvatios por metro cuadrado [µW/m²] o en milivatios por metro cuadrado [mW/m²] (1 mW/m² = 1.000 µW/m²).La fuerza del campo y la densidad de radiación de una onda electromagnética de alta frecuencia están altamente conectadas en el llamado campo lejano.
El campo lejano se basa en la distancia de la antena emisora. En la práctica, la longitud de onda suele ser normalmente menor. Si se conoce el valor del tamaño, la fuerza del campo o de la densidad de radiación (por una medición, por ejemplo), se pueden deducir el resto de valores.
1.4. Método de modulación y de acceso. Influye en la dimensión temporal de la curva que envuelve la señal emisora de alta frecuencia. Los principales tipos de modulación son AM (amplitud modulada), FM (frecuencia modulada) y PM (modulación de fase).
En el caso de la amplitud modulada, la dimensión temporal de la curva envolvente no es constante, sino que el ritmo de la señal de modulación transmitida varía. En los sistemas digitales de telefonía móvil, el método de acceso utilizado puede derivar en una pulsación periódica de la señal emisora en el canal de transmisión, originando ranuras temporales (TDMA, véase capítulo 2.4). A ello se añaden amplitudes moduladas con pulsaciones.
1.5. Hora del día y duración de la exposición
2. GSM-Telefonía móvil
GSM corresponde a las siglas en inglés de «Global System for Mobile Communications». En los inicios de la segunda generación de este sistema digital de telefonía móvil, las siglas hacían referencia al grupo que lo diseñó, «Groupe Spéciale Mobile». La tecnología GSM funciona con las redes D y E1 .
La primera generación de telefonía móvil contaba con un sistema análogo de transmisión de la voz, conocido como «Autoteléfono» o, lo que es lo mismo, redes A, B y C.
2.1. Tamaño y localización anatómica de las partes corporales expuestas
En el caso de los teléfonos móviles, la cabeza es la zona más afectada por la radiación (exposición parcial).La radiación que emite una base de telefonía móvil afecta siempre a todas las partes del cuerpo (exposición total).
2.2. Frecuencia
El campo de frecuencia desde 9 kHz hasta 300 GHz se utiliza para los sistemas de radio y es un valor establecido en los acuerdos internacionales y en los regionales. La mayoría de aplicaciones terrestres se encuentran en el campo de 9 kHz hasta 3 GHz. En este espectro, las redes de telefonía móvil GSM están asignadas a las siguientes frecuencias:GSM 900 / Red D– P-GSM (Primary GSM):
Banda inferior 890-915 MHz, Banda superior 935-960 MHz
Uplink (móvil ? base) Downlink (base ? móvil)
– E-GSM (GSM extendido, utilizado como campo de ampliación)
Banda inferior 880-890 MHz Banda superior 925-935 MHz
Uplink (móvil ? base) Downlink (base ? móvil)GSM 1800 / Red EBanda inferior 1710-1785 MHz Banda superior 1805-1880 MHz
Uplink (móvil ? base) Downlink (base ? móvil)
Hasta ahora no se ha realizado ninguna investigación que pruebe una relación significativa entre las diferentes frecuencias de emisión (frecuencias portadoras) y los efectos biológicos de la telefonía móvil. Aquí prevalecen los efectos de las pulsaciones periódicas de baja frecuencia, que se superponen a las señales portadoras de alta frecuencia (véase capítulo
2.4, tipos de modulación/procedimientos de acceso).
En general se conocen distintos efectos biológicos dependiendo de la frecuencia. Se reconoce fácilmente en el caso de las ondas electromagnéticas de alta frecuencia de los espectros ópticos. Según el tipo de frecuencia variarán los efectos: los infrarrojos crean un foco de calor en la piel y una luz visible en los ojos; la radiación ultravioleta no se percibe de forma sensorial pero en determinadas dosis es imprescindible para el metabolismo de la vitamina D y la formación de los huesos (raquitismo).
2.3. Intensidad
A continuación se representa la capacidad de emisión máxima de las bases GSM:Red D 50 vatios (W) por canal de frecuencia
Red E 20 vatios (W) por canal de frecuenciaEstas capacidades son las máximas permitidas y no se usan en las zonas de aglomeración de las bases con una alta densidad de células y ningún radio celular. De esta forma, la fuerza de emisión más común oscila entre los 5 y los 10 vatios por cada canal de frecuencia. Lo normal son de dos (red E) a cuatro (red D) canales de frecuencia por cada antena en una base.
En este caso concreto se trata de una potencia emisora del final de la emisión que llega a la antena. Las antenas de sector son las más utilizadas y tienen una dirección fija, es decir, irradian la potencia en una dirección preferente, tal y como sucede con la proyección de luz en un foco, en forma de los así llamados lóbulos. Mediante esta dirección preferente de la radiación se consigue una mayor densidad de radiación que si una misma potencia irradiara de forma completa.
El efecto es similar a una lámpara con un foco: con el reflector del foco en una dirección de radiación se consigue una luz más clara que sin el reflector. Las antenas de sector que no se instalan tienen habitualmente un beneficio de antena de aproximadamente 17 decibelios [dB] mediante la radiación completa en la dirección principal. Esto supone un aumento del factor 50 de la densidad de radiación.
Una estación base con una potencia emisora de 20 vatios creará la misma densidad de radiación en la dirección principal de la antena de sector que un emisor con 20 x 50 W = 1.000 W de potencia emisora y una radiación completa.La densidad de radiación disminuye según la distancia respecto a la antena emisora.
Esto sucede por el cuadrado de separación. Es decir, con una separación doble, la densidad de radiación disminuye en ½ x ½ = ¼; con una separación triple, nueve veces; y con una separación diez veces más grande disminuirá cien veces. Mirado al contrario, la densidad de radiación con el cuadrado de separación disminuye según se acerca a la antena emisora.La distancia de seguridad, calculada por el RegTP (Autoridad Reguladora de las Comunicaciones y el Correo de Alemania), oscila normalmente entre los 3 y los 10 metros.
Si uno se aleja de estas distancias de seguridad se alcanzarán los valores límite del reglamento 26 de la BlmSchv (ley federal alemana de protección medioambiental contra las emisiones contaminantes) se entiende que se alcanza un nivel de precaución absolutamente térmico (véase capítulo 2.4, sección «Riesgos para la salud»).
Las emisoras de radio y televisión disponen normalmente de una potencia de emisión notablemente mayor que los móviles. Los valores normales son 10.000 vatios (= 10 kilovatios) o 100 kilovatios o más. Esto se consigue porque la densidad de espacio de estos emisores no es tan grande como la de una estación base de teléfonía móvil. En muchas ocasiones se encuentran fuera de las zonas urbanas. Por ejemplo, en la ciudad de Düsseldorf hay más de 300 puestos de instalaciones de emisión en zonas urbanas, cada una con varias estaciones de base.Ya que la densidad de radiación es proporcional a la potencia emisora y a la vez es proporcional al cuadrado de separación de la antena emisora, el factor de separación cobra más peso para la densidad de radiación que el factor de la potencia de radiación.
La comparación de una estación base de 10 vatios y una emisora de radio de 10.000 vatios tiene en cuenta lo siguiente:Un emisor de 100.000 vatios puede producir la misma densidad de radiación en 10 km de separación que un emisor de 10 vatios en 100 m de separación (diferencia de potencia =100.000 W / 10 W = 10.000; diferencia de separación = 10.000 m / 100 m = 100 = ?10.000).
En este caso no se tiene en cuenta la influencia que se añade del beneficio de la antena en el caso de las antenas de sector.En su entorno más cercano, las estaciones de telefonía móvil GSM de las redes D y E son los sistemas con la mayor densidad de radiación.
Los siguientes diagramas de espectro son los más comunes y tienen en cuenta los efectos en el «paisaje de alta frecuencia» (imagen 2.1). Las redes D y E también dominan este paisaje, no por la alta potencia de emisión, sino por la pequeña separación.
RESULTADOS
Hay un gran número de descubrimientos fundados de investigaciones sobre grupos de población afectados y experimentos con animales, que indican un efecto cancerígeno de los campos electromagnéticos de alta frecuencia, como en el caso de la telefonía móvil. Experimentos de cultivo celular mostraron un indicio claro del efecto genotóxico de esos campos, como roturas de ADN y daños en los cromosomas, por lo que no se pueden descartar los efectos cancerígenos.
También son relevantes los resultados que demuestran el potencial cancerígeno de los campos de telefonía móvil y sus efectos en la transformación, multiplicación y comunicación celular, además de en otros procesos como la síntesis de proteínas y la actividad enzimática. Numerosos experimentos en personas y animales han demostrado los efectos negativos en el sistema nervioso, desde efectos neuroquímicos hasta cambios del funcionamiento cerebral, como daños en determinadas funciones cerebrales.
También se han observado problemas de aprendizaje en recientes experimentos con animales. En el caso de las personas, se demostraron los efectos en funciones cognitivas causados por los campos de telefonía móvil.
Otro de los resultados de los campos de telefonía móvil fue el que se descubrió en un experimento con animales: un aumento de la permeabilidad de la barrera hematoencefálica frente a sustancias dañinas externas. Los científicos del Instituto ECOLOG descubrieron también los efectos sobre las hormonas y el sistema inmunitario. Los campos provocaban reacciones de estrés en los animales con los que se experimentaba, reflejadas en un aumento de hormonas de estrés.
En un experimento similar pudo observarse también una clara disminución de la concentración de la hormona de la melatonina en la sangre. Este resultado es relevante, ya que la melatonina funciona como controlador del sistema hormonal y del reloj biológico, y detiene el desarrollo de algunos tumores.
Observaciones
Dr. Peter Neitzke, Coordinador del grupo de trabajo en el Instituto ECOLOG:«El centro de las investigaciones eran los efectos de los campos electromagnéticos de telefonía móvil en las personas y en los animales, que eran tan bajos que se puede descartar el efecto térmico de estos campos. Hemos sometido estos estudios a una revisión muy estricta en cuanto a los métodos utilizados, la documentación y la fuerza informativa de los resultados. De ahí se demostró que prácticamente un 80% de las publicaciones sobre experimentos en revistas especializadas no aportan mucha información acerca de la telefonía móvil y los riesgos para la salud.
Nuestra evaluación se basa en el 20% restante, cuyos datos sobre riesgos para la salud son altamente significativos.
Para mejorar la protección de la sociedad frente a los efectos de los campos de telefonía móvil, necesitamos valores de protección mucho más bajos que los actuales, tal y como se han establecido en otros países europeos vecinos…»[Instituto ECOLOG, rueda de prensa del 3 al 27 de abril de 2001: telefonía móvil y salud – Estudio por encargo de T-Mobil para advertir de los riesgos para la salud.