Así lo plantearon técnicos de la Delegación de Bosques local que asistieron ayer a una reunión con concejales para analizar los alcances de la ordenanza sancionada por unanimidad semanas atrás y que recibió fuertes críticas de juntas vecinales.
Empleados de ALPA plantearon ayer en una reunión con concejales que la ordenanza que establece una altura máxima de 3 metros para los árboles y cualquier vegetación próxima a una vivienda “es inaplicable”.
Así lo informó la concejala del MPN Sonia Alvarado tras el encuentro con técnicos de ALPA. El director de Medio Ambiente del municipio, Daniel Meier, y la jefa del cuartel de Bomberos Voluntarios, Karina Cuevas y representantes de Defensa Civil del municipio participaron de la reunión.
Meier había planteado sus observaciones a la ordenanza sancionada por unanimidad por los concejales que recibió fuertes críticas de algunas juntas vecinales y de vecinos.
Alvarado comentó que durante la reunión se plantearon varios puntos de vista respecto a los riesgos de los incendios interfase.
“La Delegación de Bosques plantea que es inaplicable la Ordenanza”, señaló la concejala. “Que hay que hacer un trabajo más profundo con lo que tiene que ver con respecto a interfase de incendios”, señaló.
Dijo que los técnicos de Bosques señalaron que “hay que hacer un trabajo de concientización y promoción” antes de implementar una ordenanza como la que fue sancionada.
Por eso, Alvarado dijo que quedó dando vueltas la idea de ampliar la ordenanza e incluir la temática de las especies peligrosas.
“A veces podar una planta a esa altura de acuerdo a la especie no permite que se desarrolle la raíz como debe ser”, comentó.
“Se expusieron varias panoramas a tener en cuenta para trabajar”, explicó la concejala del MPN. Pero reiteró que, “según Alpa es inaplicable” la ordenanza sancionada semanas atrás que regula y establece como “altura máxima de 3 metros para toda aquella vegetación que rodee en un perímetro de 6 metros a una vivienda o estructura edilicia implantada en un predio determinado”.
La semana pasada, la concejala del Pro Julieta Fernández había adelantado que había pedido informes a las áreas técnicas que conocen sobre la temática.
Dijo que su idea es “reglamentar la norma para que sea aplicable”. “La verdad que reconozco mi error de no haber solicitado el pase a comisión ya que no estaba clara”, admitió. Fernández votó a favor de la aprobación del proyecto de ordenanza que generó la polémica y que algunas juntas vecinales salieron a cuestionar.
“Pero sé que podemos solucionarla con los datos que nos puedan aportar las áreas técnicas”, afirmó la concejala del Pro.
“La ordenanza nunca tuvo un fin recaudatorio, sino que se impulsó para prevenir accidentes y también incendios”, afirmó la concejala del Movimiento Evita-FpV María Elena Brinkmann, que impulsó la norma.
“El objetivo de la ordenanza es que el vecino también tome conciencia que tiene un papel importante que cumplir en el tema de la seguridad”, explicó Brinkmann.
Aseguró que el espíritu con el cual se promovió la ordenanza fue el de trabajar “en la prevención de accidentes y de incendios”.