Tres emprendedores procedentes de Villa La Angostura y Bariloche cuentan los motivos por los cuales decidieron invertir en la ciudad chilena. Algunos van recién llegando y otros ya llevan tiempo. Afirman que existe interés por parte de los argentinos de ir a Osorno, debido a que hay nichos "vírgenes" que explotar.
La mayoría se conoce y se ubica entre sí y saben que instalarse en Osorno se está convirtiendo en una buena oportunidad de negocios tras una economía argentina que todavía está deprimida tras asumir la presidencia Mauricio Macri, en diciembre pasado.
Aprovechando que las ciudades como Bariloche o Villa la Angostura se encuentran cercanas a la vecina región de Chilenan, estos emprendedores argentinos han apostado por quedarse en Osorno (algunos de forma indefinida) y trabajar en lo que saben hacer, estableciendo nuevos nichos de negocios, algunos con resultados que ya prematuramente los hacen pensar en expandirse.
Según explican, la mayoría lo hizo por razones que van desde la estabilidad económica del vecino país, hasta la cercanía que existe con nuestra tierra natal. Asimismo, el auge de conciudadanos que llegan hasta la vecina zona representa una oportunidad para emprender en una tierra que los ha recibido bien y donde cada día se está estableciendo un mayor número de compatriotas.
Sabor a mozzarella
En un pizarrón colgado en una pared del local que mantiene en calle Los Carrera 1042 se exhibe el nombre de los 23 tipos de pizzas que ofrece la Pizzería Villa La Angostura y donde Gerardo Feest (chileno) y Sergio García Gerala (argentino) son socios desde hace unos meses.
Sergio, proveniente de la localidad turística de Villa la Angostura, tiene vasta experiencia en el rubro gastronómico, ya que en su ciudad natal posee desde hace años una parrilla rústica y una pizzería-bar que llevan el mismo nombre del local que comparte en Osorno con su socio chileno.
En un principio Sergio pensó que una buena idea sería instalarse en Valdivia, pero con el tiempo y el consejo de su socio que le alentó a quedarse más cerca de su ciudad natal, finalmente optó por quedarse en Osorno, ciudad que García califica como "llena de posibilidades".
Entre los secretos de la pizza que elabora este argentino de gran estatura y 55 años a cuestas, se encuentra la confección de la masa (la cual posee una elaboración única de la que no entrega la receta) y el queso que ocupa como base en cada preparación: la mozzarella argentina que reemplaza al queso chanco o mantecoso, que generalmente es utilizado en las pizzerías de esa zona chilena.
Cada preparación o pizza de Sergio -que va desde los cinco mil pesos a 11 mil pesos chilenos y sólo para llevar-, cuenta con una base fija de 160 gramos de este queso argentino, sumado al resto de los ingredientes que se les puede agregar, dependiendo del tipo de pizza que el cliente elija.
Entre las razones que esgrime este angosturense sociólogo de profesión para instalarse -junto a su socio- en una ciudad como Osorno y teniendo ya dos emprendimientos en su ciudad natal, está justamente que gracias a su parrilla y pizzería en territorio argentino, ha logrado hacerse amigo y conocido de varios chilenos residentes en la vecina comuna; pero también cuenta que la economía chilena es estable en comparación a la argentina, donde las tasas de inflación anual alcanzan los tres dígitos. "Es increíble, pero las cosas allá en Argentina han subido mucho su valor", explica.
Entre los planes próximos de Sergio y Gerardo está agrandar el local, que hasta ahora funciona como delivery, decisión que se basa en la alta clientela que han logrado captar, la cual pasa el dato de boca en boca.
En cuanto a sus negocios que funcionan en Villa La Angostura, Sergio señala que mientras tanto su esposa y familia están dedicados a la administración de ellos; esto, a la vez que sirve en una mesa una de sus creaciones más populares: "La Típica", donde los 160 gramos de mozzarella base se derriten junto a la salsa de tomate y una esponjosa masa cuya receta no ha querido dar a conocer.(Austral/Osorno)