El imputado tiene una mueblería y había traído a una familia como mano de obra. Le prometió buena paga, confort y estabilidad, pero no cumplió nada. La Policía allanó el lugar y rescató a los damnificados. Intervinieron organismos de Nación y Provincia.
Efectivos de la delegación local de la Policía Federal rescataron a una familia del Chaco que llegó a Bariloche engañada por su patrón, que les prometió un lugar para dormir, alimento, buena paga y estabilidad laboral aunque no cumplió en nada de eso.
La diligencia fue ordenada por el Juzgado Federal de la ciudad y se concretó ayer a la tarde en un domicilio de la calle Neuquén, en el barrio El Mallín.
En un pequeño reducto y en condiciones infrahumanas residía una familia compuesta por el matrimonio y un pequeño de 4 años. La mujer, además, atraviesa un embarazo de varios meses.
El imputado, principal responsable de ejercer trata laboral y explotación, es propietario de un comercio de venta de muebles de algarrobo, ubicado en Elordi al 500.
El damnificado es un especialista en la confección de mobiliario con ese tipo de madera y por ese motivo fue tentado para venir a Bariloche junto a su familia.
Según pudo saber El Cordillerano el comerciante le ofreció una paga semanal de $1500 y trabajo estable, comida, y un espacio cómodo para que pueda instalarse con los suyos. La oferta tentó a la familia que aceptó los pasajes y llegó a Bariloche hace varios meses.
Pero una vez que se instalaron y que comenzó a trabajar, la paga no llegó. El dinero prometido no se cumplió nunca y sólo de vez en cuando le entregaba $300 para que el grupo familiar subsista, al menos por unas horas. Esas entregas de dinero también eran esporádicas.
El caso
Fuentes confiables de la investigación ratificaron que el hecho se descubrió cuando la mujer damnificada acudió al hospital zonal para recibir asistencia por el embarazo que cursa. La situación despertó sospechas en el personal del nosocomio que notificó el suceso al número telefónico 145, creado para la denuncia de casos de trata y explotación de personas y de asistencia a las víctimas.
De inmediato se puso en marcha un protocolo articulado para brindar asistencia a los damnificados a través del cual tomaron intervención funcionarios del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, con asiento en Neuquén, y del área de Desarrollo Social de la provincia de Río Negro. Ambos organismos participaron ayer del allanamiento.
El Comité Ejecutivo para la Lucha contra la Trata y Explotación de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas fue creado por la Ley 26.842, para articular las acciones que han venido desarrollando los cuatro ministerios que lo integran en materia de prevención y erradicación de estos delitos y asistencia a sus víctimas.
“Si hubiésemos tenido el dinero o la posibilidad de irnos, lo hubiéramos hecho”, dijo una de las víctimas a los funcionarios que acudieron a su rescate.
Fuentes seguras expresaron que en principio la causa fue caratulada como trata laboral, aunque no se descarta encuadrar el caso como trata de personas y explotación, teniendo en cuenta la clara vulneración de los derechos de los afectados.
“Son pavadas”
El Cordillerano dialogó con gente del comercio implicado en el hecho. Un hombre, que no quiso identificarse aunque aseguró no ser el propietario -quien no estaba en el local-, dijo que el allanamiento de la Federal y el procedimiento de los promotores sociales “son pavadas”.
Sostuvo que “si hubiese sido real, nos hubiesen clausurado el local o el depósito, pero nada de eso pasó. Quedó todo sin efecto”.