Así lo plantean en un documento que circula entre el personal del hospital de Villa La Angostura y los centros de salud. Atribuyen a ese acuerdo que el secretario general de ATE, Carlos Quintriqueo, pactó con el gobierno provincial, gran parte del problema que se vive estos días en la salud pública neuquina.
Mientras los cortes de ruta se mantienen en varios puntos de la provincia, en Villa La Angostura el piquete bloquea desde el lunes de la semana pasada el tránsito en la ruta nacional 40.
Desde el domingo, los manifestantes impiden el tránsito de los camiones de cargas de la denominada flota internacional, que incluye a transportes, sobre todo procedentes de Chile.
En declaraciones a LA ANGOSTURA DIGITAL fuentes hospitalarias sostienen que el origen del conflicto que se vive por estos días en el sector de la salud pública neuquina tiene su origen en el Convenio Colectivo de Trabajo (CCT) que la cúpula de ATE pactó en 2018 con el gobernador Omar Gutiérrez.
Rememoran que el 17 de mayo de 2018, el MPN logró con sus aliados los 18 votos necesarios para aprobar el nuevo CCT para el personal dependiente del Sistema Público Provincial de Salud.
En esa ocasión, el bloque de legisladores provinciales del MPN no tenía mayoría, pero consiguió el apoyo de los diputados provinciales de los bloques Adelante Neuquén, UP-UNA, FRIN, de los diputados del Frente para la Victoria Javier Bertoldi y Ayelén Gutierrez y del radical Alejandro Vidal. Con esos legisladores llegó justo a los 18 votos que necesitaba.
En ese momento, los profesionales que trabajaban en los hospitales neuquinos hicieron decenas de paros para rechazar ese acuerdo que denunciaron que era nefasto para el sistema de salud provincial. Nadie los escuchó.
"La cúpula de ATE lo promocionó como el gran acuerdo y hoy se ven las consecuencias", indican las fuentes hospitalarias.
“No abordar la nefasta impronta que el CCT de Salud tiene hoy día en la vida hospitalaria y no denunciar el nefasto acuerdo de gobernabilidad recíproca de ATE con el MPN de Gutiérrez, es una evidencia más de la debilidad de las representaciones intermedias”, plantearon en un documento que circula entre el personal del hospital local y los centros de salud.
“El CCT fue una nefasta negociación entre un ministro representante de la medicina privada y un dirigente de ATE representante de los intereses políticos del MPN. Junto con el gobernador usaron a Salud Pública como prenda de unidad, como dote de matrimonio, como prueba de amor”, afirman en el documento.
Un convenio aprobado de manera exprés
“En el 2018 el CCT de Salud llevaba una ponchada de años de deliberación y no se llegaba a acuerdos finales, pero ante la necesidad de Omar Gutiérrez de mostrarse suficiente frente a una visita relámpago del entonces presidente Mauricio Macri en medio de un desgobierno provincial producto del desmanejo de un prolongado conflicto con ATEN. Gutiérrez, Ricardo Corradi y Carlos Quintriqueo cerraron el 25 de abril del 2018, entre gallos y medianoche el CCT de salud y se lo presentaron a Macri como prueba de gestión frente a un ATEN en lucha solo en la calle”, rememoran.
“Lo llevaron a la Legislatura provincial y pretendían aprobarlo sobre tablas, no lo lograron, pero la presión de ambos intereses fue tal que por primera y única vez en ese período legislativo se constituyeron las comisiones en plenario, lograron despacho y luego los 18 votos en el recinto”, recuerdan en el documento.
“Ese convenio le dio a Corradi la posibilidad de hacer desaparecer la Dedicación Exclusiva y las conducciones hospitalarias concursadas, entre otras cosas y a Quintriqueo la posibilidad de inmiscuirse y determinar todas las decisiones hospitalarias, absolutamente todas, y el 2% del salario de los trabajadores, afiliados o no afiliados”, advierten.
“Esa entrega de la suerte de Salud Pública a las manos de la ATE de Quintriqueo, según muchos en esa época, atendió las necesidades de 9000 trabajadores, pero abandonó a Salud Pública dejándola a la merced de la dirigencia de esa ATE, quien decide: quiénes entrarán a trabajar en los hospitales, cuántos entrarán, cómo ascenderán en sus puestos, cómo serán sus misiones y funciones, quiénes concursarán, quiénes ganarán esos concursos, cómo se organizarán los servicios de atención, etc.”, destacan las fuentes.
“Ese CCT es el hecho contemporáneo más significativo que determina el caldo de cultivo del presente conflicto”, afirman.