La delegación funcionará hasta el viernes en el estadio Ruca Che y luego visitará Centenario y Plaza Huincul. Además, las armas se pueden entregar en forma permanente en Santiago del Estero 131 de la ciudad de Neuquén.
Desde ayer y hasta el viernes, se reciben armas de fuego en la delegación móvil del Registro Nacional de Armas (Renar) que se instaló en el estadio Ruca Che de la ciudad de Neuquén. La entrega se realiza de forma anónima por lo que no se solicita documentación alguna y a cambio, la persona obtiene un incentivo económico que oscila entre los 500 y dos mil pesos, de acuerdo al tipo de arma. La iniciativa forma parte del plan nacional de entrega voluntaria de armas de fuego.
Al respecto, el delegado del Renar en Neuquén, Jorge Crespín comentó que “el arma se chequea y en caso de contar con pedido de secuestro, es separada y luego se informa a la Justicia”. Los aparatos inutilizados se envían a Buenos Aires para su destrucción total.
Estadísticamente, “los dispositivos que más se entregan son revólveres calibre 22, 38, carabinas y escopetas” indicó Crespín y convocó a ceder las armas “para no tenerlas en la casa y evitar inconvenientes con su manejo irresponsable”.
Desde ayer y hasta este viernes en el estadio Ruca Che de 8,30 a 14 funciona la recepción de armas. En el proceso no se solicita información de la persona que se acerca ni del arma, se chequea por si tiene pedido de captura y se precinta. En caso de no estar involucrada en un delito, se procede a su inutilización mediante una prensa.
Crespín manifestó que el plan de desarme en el país ya destruyó 177 mil armas y a partir de secuestros policiales y judiciales se contabilizan 300 mil armas que quedaron fuera de circulación.
El lunes y martes próximo, la unidad móvil del Renar estará en Centenario, en tanto que los días miércoles, jueves y viernes se apostarán en Plaza Huincul para fomentar la entrega voluntaria de armas. Mientras que en la delegación Neuquén que funciona en Santiago del Estero 131 de la ciudad de Neuquénde 8,30 a 13 se reciben armas en forma permanente. En el territorio nacional el plan se prorrogó por dos años más.