Año 1966, un grupo de jóvenes egresadas llegaron a Bariloche en el ferrocarril Roca para disfrutar de unos días en esta ciudad. Motivo: fin de los estudios secundarios. Las estudiantes se recibieron en el colegio Niño Jesús de Praga, de Olivos, y las -ahora- señoras, continuaron su amistad por todos estos años. En estos días reviven el viaje por estos lares.
Ataviadas con buzos que confeccionaron para la ocasión, 13 mujeres disfrutan desde el domingo último la amabilidad de los barilochenses y los paisajes de la ciudad lacustre, de esta manera rememoran el viaje de egresados que llevaron a cabo en 1966.
La institución educativa que las albergó en su época adolescente pertenecía a la orden de las Carmelitas Descalzas. Alicia Avalis es un poco la coordinadora del grupo y contó: “somos 33, pero en esta ocasión vinimos sólo 13”.
En su oportunidad se alojaron en el hotel Austral (ya cerrado), esta vez en el Kenton, porque “así estamos cerca del centro y podemos realizar con comodidad todos los paseos y las compras”, manifestaron casi al unísono.
Por los recuerdos pasados y por la actualidad que viven recorrieron Circuito Chico, se subieron al trencito de la ciudad, visitaron la fábrica de chocolates, subieron al cerro Otto, otras fueron a El Bolsón y “ya contratamos San Martín de los Andes, y fuimos invitadas al cerro Catedral y hoy a la noche (por ayer) a Grisú”, como gentileza de ATEBA.
Las señoras en todo momento dejaron traslucir la hermosa amistad que gestaron a través de todos estos años. Incluso ni la distancia las separa ya que una de ellas vive en Misiones y otra “que no pudo venir, en Miami (EEUU), aunque es parte permanente del grupo”, indicaron.
Anécdotas, sonrisas, convivencia, la familia, los hijos, los 84 nietos de todo el grupo, son parte de las charlas diarias. El cronista refiere en sus pensamientos que en más de una oportunidad tanto el amor, como los momentos ingratos, son parte del respaldo que demuestra la amistad forjada.
En el lobby del Kenton no faltaron los recuerdos para aquellas que ya no están. “Hoy somos 26 y 13 vinimos a este viaje”, reiteraron. Recordaron que en aquella época “vinimos en tren, hoy en avión, y unos jóvenes que venían con nosotras, luego nos reconocieron en el Circuito Chico y nos dedicaron algunos cánticos, que nos hicieron acordar a nuestro periplo estudiantil”.
La visita a Bariloche no es la primera salida que hacen juntas, ya estuvieron en Colonia (Uruguay), en Cariló; y para un cumpleaños de 60, se fueron a la selva misionera para festejar en el hotel que una de ellas tiene en los Saltos del Moconá.
Ante distintos medios de prensa indicaron que "el viaje a Bariloche es un premio que nos damos, un estímulo por esta amistad de medio siglo. Ahora viajamos como egresadas de la vida", aseguró María de los Ángeles Schefler, que desde hace 12 años tiene la mencionada posada en Misiones.
La mayoría de ellas vive en la zona Norte del Gran Buenos Aires y contaron que desde 1967 se juntan por lo menos una vez al año. Y desde hace dos décadas, con sus hijos ya grandes, consiguen hacer hasta cuatro encuentros por año.
En su relato a un medio capitalino las viajeras indicaron que empezaron a planear el viaje por Facebook el año pasado, cuando María Cristina Di Sarli (hija del famoso pianista tanguero), que es bióloga, propuso ir a Praga para festejar el aniversario. El lugar fue descartado, pero no la idea de hacer algo importante por los 50 años. Cuando se decidieron por Bariloche, una de ellas contactó a una agencia de viajes conocida que les armó el paquete por $8.289 por persona. Resuelto el presupuesto mayor, juntaron otros $400 más cada una. "Para los buzos de egresadas. Los encargué en una fábrica de Liniers", dijo Alicia, que en 1983, con la vuelta de la democracia al país, fue nombrada formalmente como presidenta del grupo.
La mayoría ejerció la docencia, encaminadas por el hecho de que egresaron con el título de Maestra Normal Nacional que otorgaba ese colegio de monjas, donde sólo estudiaban mujeres.
En la década del 60 había padres muy rigurosos que no dejaron hacer el viaje a un par de señoritas, pero esta vez no se lo perdieron. Todas aseguraron que “siempre nos divertimos mucho”, así lo demostraban ayer entre sonrisas, charlas y paseos en medio de la mágica naturaleza que ofrece San Carlos de Bariloche.
La visita
María del Rosario Ocon. María Raquel Madueño. Lia de Lujan Olazabal. María de las Mercedes Villafañe. Luciana Blanca Mandi. Emmi Gardei. Mabel Molinari. Nera Gatti. Cristina Di Sarli. María de los Ángeles Schefler. Aurelia Dolores Portilla. Alicia Marta Avalis. Daniela Michalik.
Por Juan Carlos Montiel
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