Rodeada por la inmensidad de cordones montañosos surgió una pintoresca y pequeña villa ubicada en el centro oeste de la provincia del Neuquén, sobre la margen norte del lago Aluminé.
Se encuentra distante a 306 kilómetros de la ciudad de Neuquén Capital en el departamento Aluminé y dentro de la zona turística denominada Patagonia de los Lagos. Está en medio de cadenas montañosas cubiertas de bosques de pehuenes, ejemplares de origen prehistórico que predominan y dan el nombre a la localidad.
Descubra el poder de la naturaleza
El principal capital de Villa Pehuenia en cuanto a recursos turísticos es inagotable, así se está convirtiendo en un sitio único para los amantes de la tranquilidad y la naturaleza de los ambientes cordilleranos.
Desde Villa Pehuenia usted podrá realizar todo el circuito Pehuenia, donde la presencia de centenarios pehuenes, ñires, lengas, coihues forman una espesa vegetación, entre cordones de montañas, lagos y arroyos, hacen de este recorrido un paraíso terrenal para que usted lo disfrute a pleno.
También podrá observar al impactante Cerro Bella Durmiente y los magníficos petroglifos desde el mirador Piedra Pintada o visitar al vecino país chileno por el paso fronterizo Icalma.
Un rincón de la cordillera
Esta Villa se encuentra a tan solo 15 km. de la frontera con Chile, surgió físicamente a raíz de una estrategia de Planificación del Estado Provincial con el fin de tener una oferta controlada de estas tierras, motivo por el cual el 20 de enero de 1989 fue fundada la localidad.
En Villa Pehuenia vive una población escasa y dispersa de 404 personas aproximadamente (según la proyección realizada por la Dirección General de Estadísticas y Censos de la provincia del Neuquén en octubre del 2005).
Su principal actividad económica es la ganadería ovina y bovina, la explotación forestal y las actividades relacionadas con el desarrollo turístico: la construcción, servicios, provisión de leña, mano de obra para el cuidado y mantenimiento para las casas de segunda residencias.
Todo para hacer
La majestuosidad de la naturaleza, aunado al desarrollo paulatino de la infractrutura de servicios para el turista, hacen de la villa un lugar que ofrece infinidad de posibilidades.
Desde la practica de deportes náuticos – rafting y paseos en kayac o bote por el río Aluminé, Ñorquinco, Moquehue y Pulmarí o pesca deportiva en los lagos Aluminé Litrán, Nompehuén, entre otros; cabalgatas, escaladas, excursiones de caza o trekking por verdes senderos que suben y bajan entre cordones montañosos y bosques de centenarios pehuenes.
