Así lo relató en fiscalía. Contó cómo fueron los minutos previos a que el femicida atacara a Guadalupe Curual. Las evidencias recolectadas hasta ahora desvinculan a Saúl Mellado con el femicidio, afirmaron fuentes judiciales.
La investigación por el femicidio de Guadalupe Curual sigue adelante y uno de los datos que los investigadores obtuvieron en las horas últimas descarta la participación de Saúl Mellado en el hecho.
Fuentes judiciales informaron a LA ANGOSTURA DIGITAL que una mujer declaró que el encuentro entre Juan Bautista Quintriqueo y la víctima fue de manera casual la noche del martes, en la plaza de los Pioneros de Villa La Angostura.
La testigo contó en la fiscalía que caminaba junto a Quintriqueo porque lo acompañaba a hacer un trámite. Relató que entraron a la plaza por el sector opuesta al punto donde se encontraban Guadalupe y su novio Roberto Leonardo Yevenes, que es empleado policial, pero no estaba en servicio.
Guadalupe y su novio estaban en el interior de un vehículo, estacionado casi frente al cuartel de bomberos voluntarios. En el interior del auto estaba la beba de la víctima que nació durante la relación que mantuvo con Quintriqueo.
La testigo declaró que cuando caminaban por el medio de la plaza aproximadamente, Quintriqueo se abrió y le dijo: “Esperá”.
Afirmó que no había observado que Quintriqueo portara un arma blanca. Cuando Quintriqueo se acercó al vehículo se dirigió al lado del conductor y golpeó la ventanilla supuestamente o lo agredió verbalmente.
El empleado policial bajó del auto y en esas circunstancias, Quintriqueo lo atacó con el arma blanca. El joven sufrió varios cortes. En ese momento, Guadalupe salió corriendo y gritaba pidiendo ayuda.
Quintriqueo la alcanzó en la plaza San Martín y le dio una punalada en el corazón que causó su muerte.
Las fuentes aseguraron que no hay vinculación de Mellado con el femicidio. Y ratificaron que hasta el momento todo indica que el encuentro entre el femicida y la víctima fue casual. No había una plan para encontrar a la joven en la plaza.
De todos modos, sobre Mellada pesa una denuncia por violencia de género y se le impuso una prohibición de acercamiento a la denunciante. A la víctima se le dio un botón antipánico.